VORAZ INCENDIO CONSUME A SAMANÁ

Categoría: General

Fecha: Martes 18 de Junio de 1946

Siendo las 7:30 de la noche del día 18 de Juno de 1946, el poblado fue consumido por un voraz incendio que destruyo las tres tercera parte.

Fotografía 1: periódico despertar - samaná junio 18 de 1996

LA CAUSA
De propiedad de don Luis Ocampo (hoy cantina de Tista López) existía una casa de tres pisos. En el primer piso había una polvorearía de propiedad de don Félix Patiño, en el siguiente tenía una fragua de don Jesus Cardona y en la parte superior vivía la familia de don Claudino Delgado y doña Carmen Zuluaga.
Al parecer una chispa producida en la fragua de don Jesus cayó por las hendijas del piso de madera encima de la pólvora y empezó a arder hasta producir la explosión. Desde este momento empezó en el caserío un incendio de grandes proporciones, finalizando a las 3:30 A.M
SALDO TRAGICO
En aquella conflagración murió víctima de las llamas la matrona Carmen Zuluaga de Delgado, madre de una prestante familia Samaneña.
EDITORIAL Sr. Duque
Vientos juguetones del jueves que ya caía sobre los aleros de las casas, solo presagiaban optimismo y contento en los corazones. Nada parecía diferente a in verano espléndido que gozaban los niños, los jóvenes y los mayores con la simplicidad de la vida cotidiana.
Funesto acontecer nubló aquel día y borró de un tajo el duro segar de familias enteras. El incendio de aquél dieciocho enluto a los corazones pero fortificó el carácter y la entereza de los hombres que ante la adversidad, gestionaron un nuevo proyecto enraizado en las costumbres y vida sencilla de nuestros mayores.
Aun sobre el rescoldo humeante de las ruinas, ya erguía enhiesto el carácter ganador del paisa y empezaban la batalla del resurgir. En pocos días se venían ya algunas de las propiedades construidas en maderas aserradas de las fincas circunvecinas. El espíritu luchador del que hacían gala de nuestros mayores, unos liderando la construcción de la iglesia con el padre Henao y otros ocupando su tiempo libre en menesteres orientado hacia la normalización de las actividades administrativas, sociales y económicas samaneñas.
Como homenaje a este puñado de hombres que nos arredraron ante la inminencia de la catástrofe, deberíamos responder hoy con los jóvenes asumiendo el papel que nos corresponde, liderando el proceso de cambio que tanta falta nos hace y que nuestro comunidad espera ansiosa día a día.
IMPOSIBLEDE OLVIDAR
DOÑA ANGELICA DELGADO SALZAR
El jueves hasta las cuatro de la tarde de aquel día, estábamos mi madre y yo adornado la capilla de la Santísima Trinidad del colegio de las Hermanas de la Presentación, ubicada donde hoy es el Aula Máxima del Colegio actual. Una vez terminamos, ella paso a hacer el fiambre para el viaje que haríamos al siguiente día.
Los jueves en la Iglesia de san Agustín celebrábamos con mucha devoción y recogimiento el día del Sacramentado. Había terminado la celebración y en el replique de campanas fue cuando sonó la detonación. No pensé en nada corrí a la calle y vi la casa de mis viejos abrazada en llamas, trate de subir a ella en auxilio de mi madre, pero al llegar al descanso de las escalera, tuve que retroceder ante el fuego. Desde allí vi a mi madre en el oratorio. Oraba aún… Cuando desperté estaba en los Andes, donde don Julio Arias con toda mi familia llorando la tragedia de haber perdido a nuestra madrecita en aquella fatídica tarde de Junio.
DON CARLOS MONTES
Estaba en la finca cuando subíamos hacia Samaná, vimos algo muy grave ocurría y de inmediato nos pusimos en camino y al legar en el caserío en el puente de entrada de Marquetalía, no cabía la gente, todos niños y mujeres que se refugiaban y dormían plácidamente.
DON CELIO LONDOÑO
Pero ese día la gente estaba insulsa. No sabía cómo reaccionar, sin iglesia, sin casa cural, sin colegio, sin comercio, sin que comer, unos lloraban, parecía que no supiéramos que había pasado.
No había agua en el pueblo llevábamos un verano de tres meses. El agua que llegaba era muy poca hasta en invierno. Se tenía que cargar de unos yacimientos de donde hoy es el polideportivo y ese día se rompieron las tuberías del acueducto para aparar el agua en valdes y tratar de apagar. Eran tuberías viejas galvanizadas.
DOÑA BERTHA DELGADO DE HERRERA
Fue pavoroso lo que paso en aquella lucha. La muerte de nuestra madre fue algo irreparable, que solo con la resignación de dios se puede soportar ante la desprotección en que quedó la parroquia. Nosotros ofrecíamos al padre Henao un cuarto que sirvió de Despacho Parroquial, en donde él siguió atendiendo los oficios de la Iglesia y de la reconstrucción del pueblo.
PREGONEROS DE LA RECONSTRUCCIÓN
Francisco Duque.
Enrique Restrepo.
Despues de unos días de rumiar la tristeza y pensar en la tragedia, nuestros viejos asumieron la epopeya de la reconstrucción. Cada día se veía el inicio de una nueva construcción. Poco a poco aquel campo arrasado, fue convirtiéndose en un pueblo floreciente. La tenacidad, constancia y trabajo de los abuelos llenando….
Velas, teja, ladrillo costuras y otras muchachas. Don ramón Ortiz padre de Jesus y Daniel construyó una casa grande al costado derecho de la Calle Real (enseguida de Juvenal Álzate- Tienda). Así mismo don Antonio Muñoz la cas de toda la esquina de la plaza (hoy Julio Giraldo – Droguería)…..
LA MALDICIÓN
Giovanny Toro año 2010- Mi abuelito Moises Sánchez, dijo que eso fue una maldición del anterior padrecito, que lo sacaron corriendo y de mala manera por algunos feligreses y él les echo la maldición al pueblo.

Fotografía 2: cortesía digitalización hernán bedoya garcía y hubert cifuentes garcía - cali

Fotografía 3: voraz incendio consume a samanÁ

Fotografía 4: voraz incendio consume a samanÁ

Fuente: Periodico Despertar - Samana Junio 18 de 1996. [621]

Autor: Sr Duque

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Editado Por: Cristian Giovanny Toro Sánchez.